Desde la invención de la primera
herramienta humana por el Homo hábiles,
hace unos dos millones y medio de años, la tecnología ha tenido un desarrollo
gigantesco. Las primeras herramientas eran simples cantos tallados para
conseguir filos cortantes, que les ayudaran a sobrevivir, descuartizando a los
animales que carroñeaban o cazaban, y poder así acceder a la carne que
complementaba su dieta de omnívoros. Acostumbrados a las sofisticadas
tecnologías modernas, hemos perdido la perspectiva de la propia evolución tecnológica,
y que hasta casi nuestros días (apenas 5000 años), la humanidad ha dependido de
la talla lítica como motor industrial, para procesar las demás materias,
incluidas el resto de las herramientas de hueso o madera. Durante este largo
periodo de tiempo la evolución tecnológica de la talla ha sido progresiva,
apareciendo nuevos modos de desbaste, y distintas tipologías de útiles. Lo
curioso es que a menudo los nuevos avances tecnológicos no hacen desaparecer
por completo tecnologías y útiles anteriores. El primigenio canto tallado en
sus distintas variantes, sigue acompañando a la humanidad desde el comienzo de
la industria hasta casi antes de ayer. Hoy les mostramos un canto tallado de la Época
del Cobre Final, procedente del Estrato 3 del Tramo B del Abrigo 6 del Complejo
del Humo (La Araña ,
Málaga). Sobre una gran lasca no silícea han conformado un poderoso frente
tallado, posiblemente relacionado con el tratamiento de la madera. Yacimientos Arqueológicos
de la Araña.
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