LAS EVIDENCIAS DE UN KARST FÓSIL
En la
actualidad muchas de las cuevas de la
Araña padecen una acusada sequedad, como consecuencia del
cambio sufrido por el nivel freático (que se ha situado en cotas más bajas) y
el hecho de que estemos atravesando una etapa de clima cálido en el Planeta.
Pero pese a esta acusada sequedad, las cuevas también hablan y nos cuentan su
historia, que en algunos momentos del pasado fue muy distinta de la actual.
Hubo épocas en que estas cavidades tuvieron unas condiciones muy distintas, con
un gran grado de humedad, rezumando agua y goteos por todos sus poros,
construyendo estalactitas, estalagmitas, banderolas, “órganos”, etc,
proclamando que a nivel hidrológico estaban completamente vivas, construyendo
un sin fin de espeleotemas. La perdida de humedad ha hecho que las estalactitas
dejen de gotear, los conos estalagmíticos de crecer, ofreciendo un panorama de
sequedad y en muchos puntos de descomposición, que constata la muerte del
antiguo ciclo hidrológico de épocas húmedas. Estas drásticas alteraciones han
facilitado un proceso de descomposición natural en muchos de los puntos, como
claro exponente de las consecuencias que puede ocasionar el cambio del
microclima de las cavidades, tanto en la roca madre como en los espeleotemas que
se construyeron en el pasado, en condiciones completamente distintas. Buen
ejemplo de esta situación se desprende de la fotografía que ponemos hoy, que
ofrece la visión de un punto angosto de la Cueva del Humo, en su situación actual. Cumplimos
con un propósito, de ir mostrando paisajes de La Araña y a los propios yacimientos arqueológicos, de muchos de los
cuales proceden las piezas que día a día les vamos mostrando. Deseamos que os
guste, por la historia del pasado que cuenta, con respecto a los cambios
climáticos del Planeta, y esperemos que los espeleotemas aguanten hasta el
próximo cambio climático, que les permita reactivarse, y seguir en su
estructura acumulando milenios.
Yacimientos
Arqueológicos de La Araña
